A veces, como todo a veces, las computadoras me sofocan.
Le pico al boton derecho de la rata para abrir una nueva página, y paf, se crashea el pinche windows.
Pinche John Windows Gates y su interfaz para estúpidos.
No, un momento. Que vivan los correctores de estilo de word, sin ellos mi ortografía sería peor. Uy si, si me salvan de los perseguidores de la real academía de la lengua, que me van a meter a la carcel por mal uso de esté teclado.
(¿por qué estoy diciendo esto?)
(El paréntesis siempre me ha parecido más chido, y justo es momento cuando uno dice ¿qué? ¿por qué digo estas mamadas? (entre parentesis) es más gozoso que cualquier narrativa perfectamente deshilvanada o cualquier argumento jamón bien empaquetado)

Sí, sí sofocado.Quejate un ratito más andale. Sí si mi burguesía intelectualoide blogalizada. Sí sí, con sus pequeñas aventurillas, para los cuates:
Hoy pregunte en la carretera, en la ¿talachería? lo que quiere decir talacha. Y me emocioné cuando la llanta, se convirtió en pulmon. A través del griego y luego al ser un soplo en hebreo.

Uy si que padre,sabe muchisimo usted, uy si me quejo. Uy sí sí aceptamos el absurdo en toda su infinitud. Uy,uy como ula-ula.

Leí Tercera Tenochtitlan de Eduardo Lizalde. Muy bien, muy bien. Críticas y demás desdémonas donde me hago el brillante sólo en las relecturas.

A sí sí avanzar hacia algún punto, subordinar el pensamiento. Ser vil ismo. Nimadres