Empresario se da a la fuga despuès de asesinar a vago debido a un ataque nueuràstenico negocictail en las escaleras del metro: (Sigue la nota en la lìnea 3)

Eran las 9:45 de la mañana cuando el asì llamado “empresario” con la gracia corbatosa de siempre desayunaba una famosìsima guajolota. Dìcese que las 6:15 de ese mismo dìa 24 de abril llegò el asì llamado “pelòn” Lerdo Tomàs. En el descanso de las escaleras, dìgase despuès de subir el primer tramo de èstas,no las elèctricas, sino las “normals”. Avanzaba, con paso ràpido, aparentemente instituido en esas esferas de la sociedad el “pelòn” Tomàs, cuando se hallò frente al asì llamado “vagales” del cuàl no se pudo ni identificar el nombre (obviamente) y ni siquiera el cuerpo. Ya que èste fue quemado con encendedores de pi a pa. “El asunto es alarmante-hay que hacer algo y pronto- ” Arguye y exige para su defensa Lerdo Tòmas.
El “pelòn” fue obstruido al querer subir las escaleras pegado al muro derecho de èstas. Dicen las personas que subìan al mismo tiempo que Lerdo iba “papaloteando moscas” osease en la pendeja, cuando al dar el primer paso del segundo tramo por sobre lo allì construido y llamado servicio de transporte, tropieza y azota de frente sobre la curva de la escalera. Al levantarse ve al hombre desgarbado que provocò su caìda y se avalanza con fuerza inconmensurable sobre èl. “Pelòn” Lerdo Tomàs identificado por los guajoloteros locales se diò a la fuga despuès de estrangular y prender en llamas al vago.
Moraleja: Necesitamos reformas escandalosas.